La población del mundo se encuentra en constante expansión, por ello es muy importante poder producir suficientes cultivos cada año para proporcionar alimentos, ropa y otros productos agrícolas a todos. El crecimiento de los cultivos puede llegar agotar los nutrientes que nos da el suelo después de unas cuantas temporadas, por eso, los fertilizantes artificiales se han vuelto una parte importante, con ellos se obtienen los nutrientes que necesitan para crecer y cosecharse.
Pero que es mejor ¿los fertilizantes orgánicos o químicos?, Si hablamos de alimentar a un mundo hambriento, los fertilizantes inorgánicos son insuperables en su capacidad de proporcionar altos niveles de nutrientes a las plantas de una manera eficiente y económica. Comprender sus diferencias nos ayuda a todos a entender sus usos apropiados. Las plantas alimentadas con una dieta estricta de fertilizantes orgánicos no son necesariamente más saludables para comer que las alimentadas con fertilizantes artificiales. La calidad nutricional de los alimentos está controlada por la cantidad y equilibrio proporcional de los nutrientes suministrados a la planta, no por la fuente del nutriente.
La escorrentía de nutrientes provenientes de las granjas, mezcladas con fertilizantes sintéticos, ha afectado negativamente los ecosistemas terrestres, según la plataforma Intergubernamental Científico-Normativa sobre Diversidad Biológica y Servicios de los Ecosistemas (IPBES). Los hábitats de agua dulce y marinos han sido los más afectados, lo cual se manifiesta con las floraciones recurrentes de algas, como sucede en el lago Erie, en América del Norte, y las “zonas muertas” desprovistas de vida acuática, como la del Golfo de México.
La salud humana también está en riesgo. Las emisiones de amoniaco agrícola pueden combinarse con las emisiones de los vehículos y crear partículas peligrosas en el aire que exacerban las enfermedades aumentar la mortalidad asociada con la COVID-19 en 15%.
El uso de todos estos fertilizantes, pesticidas y herbicidas artificiales para los cultivos tienen la gran desventaja de ir acabando con nuestro medio ambiente por la mezcla de químicos que se necesitan para realizarlos, por eso es importante empezar a considerar diversas formas para cultivar sin contaminar. En Kleenoil nos unimos para ayudar a nuestro medio ambiente de componentes como el nitrato de amonio que tienen los fertilizantes y pesticidas industriales que se quedan en la tierra después de realizar los cultivos y van contaminando poco a poco nuestro medio ambiente y los siguientes cultivos en esa tierra, por eso después de extraer tus cultivos es importante que se absorban todos estos componentes dañinos con Biomatrix un Absorbente industrial natural hecho del musgo Sphagnum, ideal para el control de derrames, ya que encapsula el aceite, combustibles, disolventes, metales pesados, pesticidas, herbicidas y productos químicos en la tierra y en el agua.
Todos necesitamos tener acceso a alimentos saludables y nutritivos, pero es de suma importancia que cuidemos a nuestro planeta en el proceso. Ayudemos a tener un consumo más responsable, recuerda que el cambio esta en cada uno de nosotros, ¡por un planeta más verde!
REFERENCIAS
Chemical Safety, Fertilizantes. Fecha de recuperación: 17/02/22. Recuperado de: la siguiente nota.
Zoom, Fertilizantes orgánicos vs Fertilizantes inorgánicos. Fecha de recuperación: 17/02/22. Recuperado de: la siguiente nota.
ONU, Programa medio ambiente (2020), Fertilizantes: desafíos y soluciones para proteger nuestro planeta. Fecha de recuperación: 17/02/22. Recuperado de: la siguiente nota.